Este 1 de agosto se conocieron los equipos ganadores de la segunda Datathon del Pacífico, concurso que nuevamente buscó promover entre los jóvenes la formulación de soluciones innovadoras basadas en datos para contribuir al desarrollo de la región Pacífico.
En esta edición, la Datathon del Pacífico convocó a 212 estudiantes de instituciones de educación superior del Cauca, Nariño, Chocó y Valle del Cauca, quienes pusieron a prueba sus habilidades en análisis y visualización de datos y trabajaron de manera multidisciplinar para abordar retos de región asociados a temáticas como emprendimiento, movilidad, cambio climático y biodiversidad.
“Con este concurso estamos consiguiendo apuntar a mejores proyectos y logrando ese trabajo en equipo y asociatividad entre organizaciones y personas, lo que hace que los datos tengan información relevante para la transparencia y para lograr un mayor desarrollo para el Valle y para la región Pacífico”, aseguró Manuel Reina, director de Desarrollo Regional de ProPacífico.
Tras la evaluación de propuestas, se preseleccionaron 18 equipos y posteriormente se identificaron a los diez finalistas que sustentaron los proyectos desarrollados de manera visual e interactiva ante el jurado compuesto por: Esneyder Córtes, director de Planeación y Estrategia de la Fundación WWB Colombia; Darwin Castro, gestor de Transformación Digital en Fundación Carvajal; Carlos Javier Arias, Gerente Sistema Chipichape en Bancolombia; Diego Álvarez, Research Associate-Performance, Innovation and Strategic Analysis for Impact (PISA4I) en Alliance Bioversity International & CIAT y Alejandro López, director de Cali Cómo Vamos.
“Estoy muy contento de ver todas las iniciativas que desarrollaron los estudiantes, en realidad son ideas que se empiezan a materializar aportando a una mejor ciudad, a un mejor país y desde focos muy importantes. La invitación para ellos es seguir en esa línea, seguir materializando sus propuestas para que con toda esa información y conocimiento podamos seguir mejorando nuestro país”, mencionó Carlos Javier Arias, gerente de Bancolombia.









Los ganadores
El equipo Aurum compuesto por estudiantes de la Universidad Autónoma de Occidente y la Universidad ICESI, ocupó el primer puesto con su propuesta GAIA, una plataforma que respondió al reto en la temática biodiversidad. El segundo lugar lo ocupó JEDS-Team, de los estudiantes de la Universidad San Buenaventura, en la temática Salud, y en el tercer puesto se ubicó Terri innova, innovación política desde el territorio propuesta desarrollada por estudiantes de la Universidad del Cauca y la Universidad Nacional Abierta y a Distancia.
“Este es un gran logro para nuestro equipo y representa un crecimiento personal y profesional para cada uno de nosotros. Es fundamental que todos los estudiantes se motiven y participen en este tipo de eventos, ya que enriquecerán sus experiencias y conocerán diferentes perspectivas", destacó Sarah Cano, integrante del equipo JEDS-Team.
La Segunda Datathon del Pacífico fue liderada por ProPacífico y la Universidad Autónoma de Occidente con el apoyo del Departamento Administrativo Nacional de Estadística - DANE, Fundación WWB Colombia, Fundación Carvajal, el OEM, Observatorio para la Equidad de las Mujeres de la Universidad ICESI y Fundación WWB Colombia, Cali Cómo Vamos, Alliance of Bioversity International and CIAT, PlaSA Colombia, Iniciativa sobre Políticas y Estrategias Nacionales-CGIAR, ESRI Colombia, la Cámara de Comercio de Cali, la Universidad Nacional Abierta a Distancia, Bancolombia, la Corporación para la Integración y Desarrollo de la Educación Superior en el Sur Occidente Colombiano-CIDESCO, la Red de Universidades para la Innovación del Valle del Cauca- RUPIV y CAMACOL Valle.
Para más información: ¡Así vivimos la sustentación y premiación de la Segunda Datathon Pacífico!
Muchas veces no le damos importancia al camino que hemos recorrido ni a lo mucho que hemos avanzado y preferimos quedarnos con lo que nos falta. Tampoco nos tomamos el tiempo para reconocer los triunfos intermedios ni las victorias tempranas, sino que nos quedamos, casi como una adicción, en todo lo que falta, gastando energía en buscar culpables y en echar culpas. Esto ocurre en la vida en general, pero también en asuntos regionales, en especial en los relacionados con los grandes proyectos de infraestructura estratégica.
No pretendo que estemos completamente felices cuando hay proyectos que han estado parados por años como la Mulaló-Loboguerrero y menos que nos olvidemos de lo que falta, como el cierre de la estructuración y financiación del dragado de profundización de Buenaventura, pero sí que reconozcamos y celebremos el camino recorrido y los proyectos que están en ejecución como la concesión 5G Nueva Malla vial del Valle que presenta un avance del 10%, con obras tan importantes como la prolongación de la Av. Ciudad de Cali hasta Jamundí.
Es un hecho que este tipo de proyectos tardan para ser una realidad y requieren fases de prefactibilidad y factibilidad, por lo que por años hablamos de ellos y solo después de mucho tiempo vemos su ejecución. Esto sin contar con las complejidades propias de nuestra normatividad que históricamente han hecho que tarden mucho más que en otros países, como por ejemplo el licenciamiento ambiental, las consultas o constantes cambios en la reglamentación.
Sin embargo, es importante ver con algo de perspectiva lo que ha pasado en la historia reciente de nuestra región. En los últimos 8 años, de 10 proyectos priorizados el Tren de Cercanías, el Aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón y la vía Pasto - Popayán han pasado de fases de prefactibilidad a factibilidad y ya están listos para aprobación y apertura de licitación. Así mismo, varios proyectos como la doble calzada Buga- Buenaventura, la Vía 4G Santander de Quilichao - Popayán y la Nueva Malla Vial están hoy en ejecución, generando empleos directos e indirectos.
Esto ha sido el resultado del trabajo colaborativo, riguroso y preciso entre la Gobernación, alcaldías, Bloque Parlamentario, gremios y ProPacífico. Sin duda falta mucho y son muchas las ‘peleas’ que aún debemos dar, pero lo claro es que nuestra región tiene dos grandes proyectos en ejecución que traerán no solo competitividad, sino empleo y activación económica. También importante resaltar que hoy, a diferencia de hace algunos años, tenemos proyectos listos para competir por recursos del Gobierno Nacional como el Tren de Cercanías y esto es un paso gigante que hace que veamos con ilusión el futuro.
Debemos seguir trabajando de manera conjunta para lograr recursos para nuestra región, sin olvidarnos del camino recorrido ni de lo que hemos logrado hasta hoy. Esto debe sacarnos una sonrisa de satisfacción y nos obliga a seguir trabajando por el desarrollo de nuestro Valle del Cauca sin señalamientos y sí con mucho trabajo conjunto.
Tomado de elpaís.com
Poder transitar por las calles sin miedo a ser robado, salir o entrar al barrio donde vivimos o a nuestro lugar de trabajo sin pensar en que nuestra integridad está en riesgo son derechos que todos deberíamos disfrutar, sin embargo, en nuestra región algunos problemas de seguridad se nos han convertido en paisaje y nos han alejado de esa sensación de tranquilidad. Incluso, a muchos no parece alarmarlos que Cali y Palmira se mantengan entre las 50 ciudades del mundo con más homicidios o que en el Valle del Cauca haya más de 2000 muertes violentas al año.
Es un hecho que la seguridad en el suroccidente colombiano se ha ido deteriorando en los últimos años, las razones son muchas y sin duda no es solo responsabilidad de este Gobierno Nacional, ni de los recién posesionados gobiernos locales. Sin embargo, lo que sí es claro es que debemos tomar acciones decididas y concretas para frenar esta tendencia y, sobre todo, mejorarla.
Necesitamos que no se use esta situación para luchas o peleas políticas. El problema es lo suficientemente grave como para gastar el tiempo en confrontaciones. Así mismo, es claro que las soluciones no vienen de un solo actor y que como sociedad debemos unirnos para aportar a la solución.
Lo primero y fundamental son las acciones del Gobierno Nacional como primera autoridad militar y de policía del país. Sin embargo, acá se requiere mucho más que soldados y policías, es necesario contar con una mirada estratégica, la presencia permanente del ministro de Defensa y de los altos mandos militares y de policía, además de una intervención judicial que aporte con investigación y judicialización.
A los grupos al margen de la ley se les combate con inteligencia, golpes contundentes de la fuerza pública y cero tolerancias con sus acciones criminales. La búsqueda de la paz debe ser un propósito de todos, pero para lograrlo se requiere de la disposición de todas las partes y en el suroccidente ni las disidencias, ni los otros grupos al margen de la ley han demostrados reales intenciones de hacer la paz.
Por otro lado, se requiere de gobiernos locales decididos a coadyuvar con el gobierno central, aportando recursos que apoyen a la fuerza pública y programas de prevención de la violencia. De esta situación no saldremos solo con pie de fuerza y la lucha armada, es de vital importancia generar oportunidades para los jóvenes para poder arrebatárselos a los grupos armados. También es importante generar entornos de desarrollo en la ruralidad.
Algo en lo que deberíamos enfocarnos es en involucrar a la ciudadanía, no como una red de informantes o extensión de la fuerza pública, sino como los principales actores que conocen el territorio y saben cómo se puede arrebatar a los jóvenes del peligro de ser reclutados. Algunos de estos programas ya se implementan en la región en el marco de Compromiso Valle, integrando la capacidad del sector privado, público, comunidad y la academia.
En un país donde se ha hecho tanta política con la guerra y la paz es difícil dar estas discusiones, pero no hay nada más social que la seguridad, está en juego el principal derecho que es la vida de los ciudadanos. Tenemos que volver a centrar nuestras fuerzas en lo importante. No hay desarrollo ni prosperidad sin la seguridad, por esto debemos unirnos para darle solución a este flagelo que parece no tener tregua en esta zona del país.