Hace un año la pandemia sorprendió a quienes trabajaban en la formulación de los Planes de Desarrollo Territorial (PDT), replanteando lo propuesto desde las campañas, el empalme de los nuevos gobernantes y los dos primeros meses de gobierno. No por nada, 2020 fue el año en el que por primera vez se modificó el cronograma de los PDT para que las entidades territoriales ajustaran, en una carrera contra reloj, sus planes y presupuestos. De hecho, muchos de ellos incluyeron capítulos dedicados a enfrentar la crisis sanitaria y sus efectos económicos.
A casi un año de su formulación, vale la pena recordar que en los PDT los mandatarios territoriales consignan sus compromisos -medidos por indicadores- y trazan las líneas en las que se invertirá el presupuesto de sus alcaldías o gobernaciones. Como su nombre lo indica, son planes que pretenden impulsar el desarrollo de los municipios, distritos y departamentos. Por la importancia de la tarea, desde ProPacífico impulsamos una estrategia para la formulación e implementación de los PDT con la inclusión de la agenda global de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que contienen los compromisos de 193 países para erradicar la pobreza a 2030.
Una de las actividades que llevamos a cabo, fue poner una lupa a los indicadores de los planes, particularmente en Candelaria, Cali, Jamundí, Palmira y Yumbo, municipios de nuestra región de ciudades. Este análisis nos mostró, por ejemplo, que estos cinco PDT tienen en total 2.388 indicadores, que los de Cali y Candelaria son los que más indicadores tienen (792 y 500 respectivamente), y que los ODS en los que hay más indicadores son: paz, justicia e instituciones (494), educación de calidad (343), y ciudades y comunidades sostenibles (380).
Organizar 2.388 indicadores sobre todas las problemáticas que pueden tener estos cinco municipios es una tarea compleja. Sin embargo, debemos saber que, de llegar a cumplirse todo lo contenido en los PDT, la región sería sustancialmente diferente. Tomemos tres ejemplos: 1. Al año 2023, casi 10 mil hogares nuevos tendrán acceso a fuentes de agua mejorada en Candelaria y Yumbo; 2. Avanzará de manera contundente la estructuración del tren de cercanías, que beneficiará a más de tres millones de habitantes, en Cali, Jamundí, Palmira y Yumbo; y 3. De cumplirse las metas que plantearon cuatro de los cinco municipios, en 2023 se presentará una reducción de más de 250 homicidios respecto a 2019, lo cual no solo representaría una mejora para la región, sino que bastaría para cumplir la meta del país para la reducción esperada y contenida en Plan Nacional de Desarrollo.
En tiempos de crisis es fundamental tener claro nuestro norte. Para saber si avanzamos en la dirección correcta, el seguimiento a los PDT y sus indicadores es una tarea fundamental. No solo está en juego la transformación de la región y la mejora de la calidad de vida de sus habitantes, sino también, el aporte que desde el suroccidente hacemos para alcanzar las metas de desarrollo de Colombia.